Humor, ternura y música- 23/02/2009.
Teatre de Ponent- Granollers- Barcelona.
Pep Barbany, 9 Nou del Vallès Oriental.
La veterana compañía Los Excéntricos presenta en el Teatre de Ponent, su espectáculo de clowns musicales.
Ropa de colores imposibles, caras maquilladas y peinados imposibles. Situaciones estrambóticas, muchas muecas y ganas de arrancar risas. Y música, mucha música. Les presentamos a Los Excéntricos, una veterana compañía catalano-francesa de clowns musicales que el viernes presentó su “Rococó Bananas” en el Teatre de Ponent y donde estará hasta el próximo domingo. Payasos de corte clásico, pensado para todos los públicos, con treinta años de experiencia y mucho oficio.
Los gestos, los gags, la indumentaria y sorprendentes habilidades instrumentales son las armas de Marceline, Sylvestre y Zaza, el trío protagonista. Zaza, orejas grandes y sonrisa eterna, contagia al público con su imparable risa burlona. Aparentemente es el payaso “tontorrón”, pero su carisma, sus habilidades musicales y números tan sencillos e increíblemente efectivos, como el gag donde bebe, poco a poco, una copa de cava, ponen de manifiesto su talento. Marceline, la dama de la función, es la diva, coqueta, con un gusto por los vestidos un tanto discutible y con unas ansias de protagonismo que la hacen cantar, hacer malabarismos y bailar con más simpatía que gracia. Finalmente Sylvestre, el maestro de ceremonias, el más charlatán y el payaso que pretende ser “serio”, profesional, pero acaba siendo el más desastroso de todos.
“Rococó Bananas” es, en manos de este trío, un surrealista cabaret de variedades, un conjunto de números musicales y de malabares con tropiezos, caídas, bofetadas y platos rotos. La música es la base del espectáculo, con un piano de madera lleno de sorpresas e instrumentos tan curiosos como un mocho-contrabajo o dedos que tocan música. Los intentos fallidos de ofrecer números musicales y malabares son el principio de un divertido caos.
La experiencia y oficio de esta compañía, formada después de muchos años de calle y haber rondado por todo el mundo, se transmiten en una inmediata conexión con el público, predispuesto a pasar un momento divertido. La sinceridad y sencillez de los gags funcionan a la perfección. No es necesario una nariz roja ni grandes efectos especiales. El humor de “Rococó Bananas” surge de la humanidad y ternura de tres clowns que simplemente se dejan ir y hacen lo que saben hacer: el payaso.
Pep Barbany, 9 Nou del Vallès Oriental.
